Nuggets


En una eliminatoria resuelta, solamente, en cinco encuentros, el equipo que, por historia reciente, era considerado el favorito, se enfrentó a un desafío único y que tiene pensado dar que hablar por muchos años en la NBA: Nikola Jokic.

El serbio, dominante en toda la temporada, fue amo y señor también de los Playoff 2023. Determinante y líder, Era a lo que ya nos tenía acostumbrado el MVP de temporada regular, y también de las Finales, obvio.

Un jugador sobresaliente que encajaría en cualquier franquicia.
 

El ambiente en la eliminatoria fue pasajero, un mero empate a uno tras el segundo encuentro que fue todo un espejismo para Butler y compañía.

Si Jokic estaba en la cancha, ganar los duelos estaba garantizado desde el minuto uno hasta el fin de cada cuarto. 

Dominante el equipo de Denver, que no puso freno en ganar los siguientes tres enfrentamientos para llevarse la copa de campeones a casa, tomando la delantera en ataque con un Jamal Murray imponente demostrando, el base, el descomunal talento para controlar los partidos.

Ambas franquicias mostraban sus cartas, pero la nueva era del equipo del oeste no se amilanó ante unos Heats con jugadorazos como Adebayo y Lowry. Con una increíble resistencia y un espíritu de lucha que parecía haber jugado múltiples finales, no dejándose intimidar por los anillos del equipo el este.
 
Tenían en el quinteto a la estrella indiscutible del partido, de las finales, de los playoffs y de la temporada regular. Aunque, no sólo fue impresionante el rendimiento del serbio, sino también de la gran cohesión y confianza que existía entre todos los integrantes del equipo. Si mantienen el bloque volverán a ser grandes en 2024.

No hubo sorpresa, los Nuggets lograron el campeonato como cabía esperar haciendo historia en la franquicia. Era evidente que celebrarían el título pero, aún así, las finales hay que jugarlas. 


No será una final inolvidable pero sí lo será el hambre incansable Nikola Jokic y su equipo.

AZP


Vuelven los pivots ganadores